camping El Carbayín
Tapia de Casariego - Asturias
A 5 Minutos de la Playa de Serantes y Penarronda
Desde el 1982 haciendo amigos
En 1982, Marcelino y Carmen, unos apasionados por el aire libre y la vida en la naturaleza decidieron crear un camping en un lugar privilegiado. Con mucho esfuerzo y dedicación, construyeron un pequeño camping en medio de la naturaleza y lo abrieron al público. Así nació nuestro camping, que desde entonces ha sido un lugar de encuentro y aventura para miles de personas.
A lo largo de los años, nuestro camping ha crecido y se ha transformado en un lugar moderno y cómodo para todos los amantes del camping y la naturaleza. Contamos con una amplia variedad de opciones de alojamiento, desde acogedores bungalows hasta espaciosas parcelas de camping para tiendas y caravanas.
Un camping fiel a sus raices
A pesar de los cambios y mejoras, nuestro camping sigue siendo fiel a sus raíces originales. Nos enorgullecemos de ofrecer un ambiente relajado y acogedor, en el que las personas puedan conectarse con la naturaleza y disfrutar de la vida al aire libre.
Nuestro camping cuenta con una amplia variedad de actividades y servicios, zona infantil, merendero, cafetería y mucho más. Nuestro equipo de profesionales está siempre disponible para ayudar a nuestros huéspedes a planificar sus aventuras y experiencias.
Durante los últimos 40 años, nuestro camping ha sido testigo de innumerables momentos inolvidables y ha acogido a muchas familias y amigos que regresan cada año para crear nuevos recuerdos. Esperamos seguir siendo un lugar especial y acogedor para todos aquellos que buscan una experiencia única en medio de la naturaleza. ¡Te esperamos en camping el Carbayín!
La moto de Marcelino
Marcelino y Carmen recorrían las arduas carreteras de Asturias de la época en una Moto Guzzi 65. En uno de sus viajes se paró impresionado tras divisar un camping recien estrenado en el otro extremo de Asturias. Decidido, se dirigió a hablar un rato con los dueños y tras aquella entrañable conversación, le animaron a crear un camping en la otra punta asturiana. Decidido a materializar aquella labor en sus tierras cercanas la la Playa de Serantes, y tras ello conllevó a arduo trabajo con la ayuda de su mujer y de sus hijos un 3 de Agosto de 1982 abrió sus puertas con la sorpresa de que ya habían clientes en la puerta. Su buen hacer durente ya más de 40 años y ahora bajo la gerencia de la tercera generación, la moto de Marcelino sigue presente a la entrada de nuestro camping como pequeño homenaje a un entrañable soñador.